Salí de mi a buscar un cuerpo que sedujera a mi amante insatisfecha. Elevado ya, casi alcanzando el universo escuché una voz que gritaba: " ¡Eoooooo, eoeooooooo!!!!!! ¿Hay alguien ahi...? ¿Alguien me escucha...? ¿Quiero salir de aqui...?".  
     Con voz firme, le contesté: "¡Si!. ¡Yo te ayudo, estoy dispuesto!, pero, ¿Tienes tú un cuerpo que seduzca a una amante insatisfecha...?".
     Él con voz tímida me contestó: "Yo si,  pero, verás, es que hay una pequeña.... Bueno  mejor dicho,  un gran cosilla a tener en cuenta.... 
     Dime amigo, ¿Qué te ocurre?  
     Es que, yo, yo... !Soy un oso!"... 
     Bueno no te preocupes, nadie es perfecto...
     ¡Venga, sube y agárrate a mi abrigo!
No existen más que dos reglas para escribir: tener algo que decir y decirlo. Oscar Wilde (1854-1900) Dramaturgo y novelista irlandés.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
 
 
jeje, superguay!
ResponderEliminar